Uno de los aspectos centrales de la vida institucional de toda institución educativa (II.EE) es la gestión escolar. La gestión como concepto, con su naturaleza y características, ha ingresado al terreno de la educación para orientar y alinear el quehacer educativo, de manera que permite las coordinaciones necesarias en función de los aprendizajes que se quiere alcanzar. Una dimensión de la gestión escolar es la organización anual de los tiempos que se establece con la finalidad de consolidar la participación de los docentes en la mejora continua de los procesos educativos. El presente artículo pretende poner de relieve los beneficios que trae esta propuesta de trabajo colaborativo en perspectiva de una mejor planificación, mayor seguimiento de las acciones y de la evaluación continua de la gestión escolar.  

NATURALEZA DE LA SEMANA DE GESTION:

El Ministerio de Educación (MINEDU) publicó  la “Guía para la Gestión Escolar en instituciones y programas educativos de la educación básica.” (MINEDU, 2023) Esta guía es parte del marco normativo para el sector y ofrece las orientaciones a los directores, docentes, administrativos para la organización del año en las II.EE.  “Incluye contenidos para los equipos directivos, personal docente y administrativo, que servirán en la implementación de los procesos, actividades y tareas diarias necesarias para garantizar el acceso y permanencia en la Educación Básica y el desarrollo de aprendizajes” (p.2).

La estructura y organización de la guía nos permite reconocer que las semanas de gestión como propuesta de trabajo está asociada al compromiso de gestión referido a las condiciones operativas orientada al sostenimiento del servicio educativo ofrecido por la II.EE. (Compromiso de gestión 03) y que trae como tarea implementar actividades para garantizar los aprendizajes de los estudiantes.  Además de esta guía el MINEDU emitió la norma técnica “Disposiciones para el desarrollo de las semanas de gestión en las Instituciones Educativas y programas educativos de la educación básica” (MINEDU,  2023a) donde se desarrolla de manera más específica aspectos centrales para la comprensión y ejecución de este tiempo de trabajo.

Considerando este marco normativo, la semana de gestión en el marco de la organización del tiempo del año escolar y como práctica asociada al compromiso de gestión 03, permite ordenar y adecuar los tiempos para realizar un trabajo colaborativo con la finalidad de afianzar la propuesta educativa en la escuela. El marco normativo considera que el año escolar está integrado por las semanas lectivas y las semanas de gestión. Las semanas lectivas se vinculan directamente con el proceso enseñanza – aprendizajes, la consolidación y reforzamiento de los aprendizajes. Es el tiempo donde los docentes desarrollan actividades con la finalidad de que los estudiantes puedan alcanzar las competencias necesarias para el logro de los aprendizajes. En general, las semanas lectivas buscan fortalecer la formación integral de los estudiantes (MINEDU, 2021). Por su parte la semana de gestión favorece el trabajo colegiado o individual del personal de la II.EE. para identificar los avances e identificar las oportunidades para desplegar acciones en función de la mejora.

De lo dicho hasta ahora, la semana de gestión está enmarcada en la organización anual de la II.EE. y permite la mejora del servicio educativo identificando sobre todo las oportunidades en la gestión educativa desde el trabajo colaborativo desplegado por la dirección con el apoyo y la contribución de los miembros de la comunidad educativa. Esa es su naturaleza y su condición que debe ser integrada en la práctica docente.

ORGANIZACIÓN DE LA SEMANA DE GESTIÓN

Antes de abordar las organización de la SG es preciso considerar que en este tiempo de promover la mejora continua se podrá  desarrollar programas de formación continua de los docentes y directivos (MINEDU, 2023). La Guía para la Gestión Escolar
en instituciones y programas educativos de la educación básica, establece 03 tipos de bloques de SG: de inicio (previo al inicio de clases), intermedio (entre clases) y de cierre (posterior a clases). Cada una de estos bloques están distribuidos en acciones específicas que dan sentido a la gestión escolar: actividades enfocadas a la organización de la comunidad educativa, actividades enfocadas a los instrumentos de gestión o documentos de gestión, actividades enfocadas en el trabajo con familias.   

Las acciones enfocadas a la organización de la comunidad educativa guardan relación con la dinámica al interior de la II.EE. se refiere a los procesos y estrategias planteadas para lograr la participación de los actores educativos: comités, equipos de trabajo que ayudarán en el logro de los objetivos. Se vincula de manera directa con la organización de la institución, los valores que orientan las prácticas cotidianas, las relaciones internas que se ha logrado, las funciones y la distribución de tareas que permiten el desarrollo de la educación. De manera que, en la SG se debe observar la conformación de los equipos de trabajo, las funciones y responsabilidades, así como las actividades que se han programado en el ejercicio de sus funciones.

En el ámbito de las actividades enfocadas a los instrumentos de gestión o documentos de gestión que orientan el quehacer educativo de manera particular el Proyecto Educativo Institucional, el Plan Anual de Trabajo, el Proyecto Curricular Institucional, el Reglamento Interno. Todos ellos ordenan la vida institucional, acompañan los procesos de aprendizajes y animan el bienestar socioemocional de cada uno de los actores educativos. Por lo que la planificación, seguimiento y evaluación de cada uno de estos documentos garantiza una educación integral en los estudiantes y el ejercicio pleno de los docentes. En cada bloque se debe observar no solo el cumplimiento de lo propuesto sino la forma y el modo como se está desarrollando con la finalidad de observar las oportunidades para la mejora de los aprendizajes.

Las actividades enfocadas en el trabajo con las familias están estructuradas de manera que se busca afianzar la participación de los padres de familia en la vida de la II.EE. Afianzar la participación de los padres de familia trae consigo la implicación como instrumento para la mejora de los aprendizajes. “La implicación recoge el concepto de participación e incluye una visión ampliada en la que las relaciones familia-escuela se plantean como un instrumento esencial para la mejora de los procesos y resultados educativos.” (GUZON, J. – GONZALES, F. 2019). Los padres de familia deben acompañar las propuestas de las II.EE.  en el proceso de aprendizaje, la gestión del bienestar de la II.EE. y el bienestar socio emocional de los estudiantes.

Cada una de estas actividades afianzan y soportan la gestión y organización escolar que exige la interacción de los actores educativos, que precisa generar espacios favorables para el logro de los aprendizajes y promueve una participación democrática de los actores educativos en la toma de decisiones. Todo ello en un marco cultural que da sentido a lo que se realiza y que orienta la convivencia y genera ambientes y condiciones para el logro de los aprendizajes. (UNESCO, 2011). La gestión escolar trae consigo un vínculo real y efectivo, el compromiso de los miembros de la comunidad educativa que se manifiesta en la capacidad para responder a las exigencias propias de cada uno de los procesos desde los valores y principios asumidos en el tiempo de permanencia. (DE LA O CASILLAS, J 2017).

IMPORTANCIA DE LAS SEMANAS DE GESTION

Desde lo compartido hasta ahora podemos considerar que la SG afianza los procesos de mejora continua de la gestión escolar. Sin embargo, no debemos dejar pasar un aspecto importante que trae consigo: el trabajo colegiado. El trabajo colegiado es una estrategia que se quiere implementar en este tiempo de trabajo para superar la cultura individualista y fortalecer los equipos docentes desde el diálogo, la escucha atenta, el intercambio de experiencias. El horizonte del trabajo colegiado debe ser la mejora de la práctica docente, afianzar el compromiso de los docentes, fortalecer la confianza profesional y consolidar el respeto, tolerancia y corresponsabilidad. (AGUIRRE, J; BARRAZA, L, 2021).

Siendo así, el trabajo colegiado es una estrategia que promueve el intercambio de experiencias en función de las necesidades de la II.EE. para responder a los desafíos identificados. Así mismo, permite consolidar las competencias docentes  in situ desde la reflexión y análisis de la práctica pedagógica. “se convierte en un pilar importante para la mejora continua de la práctica docente y del plantel en su conjunto; es un mecanismo cohesionador de los esfuerzos individuales y una ruta segura para el logro de los propósitos educativos” (SUBSECRETARIA DE EDUCACION MEDIA SUPERIOR, 2015). Este esfuerzo crea y genera una cultura organizacional que permite la vigencia de principios y valores que revierte en el bienestar de la II.EE.

Por lo que, en el trabajo desplegado durante la SG se podrá evidenciar la interiorización de estos valores, creencias, afianzar los principios que refleja un modo de proceder que discurre en la vida institucional y afianza la propuesta educativa. Así mismo, la SG asegura la coherencia cotidiana de los miembros de la II.EE.  generando un compromiso con los valores propuestos y el carisma de la institución. En general, podemos decir que la SG afianza la cultura organizacional es el clima institucional que permitirá una participación plena y madura de los actores educativo en los procesos educativos. Debemos recordar que “lo más importante para una institución educativa es tener un buen clima organizacional donde las metas estructurales de la organización deben ser conocidas por todos los integrantes o actores partícipes de los procesos educativos.” (BURBANO 2020).

TAREAS POR ASUMIR

Lo primero que debemos reconocer es el valor de la SG porque permite afianzar y consolidar prácticas educativas que son compartidas, narradas entre pares para mejorar los procesos educativos. Se debe asumir la importancia de saber escuchar al otro y el valor que tiene su palabra, no solo para validar su experiencia sino para aprender con él desde lo logrado y lo no logrado. En ese trabajo colegiado se da la posibilidad de encontrarse desde su plena y máxima humanidad buscando un horizonte común.

Otro aspecto fundamental de la SG es pensar y actuar como un todo, valorando y reconociendo la particularidad. Particularidad que se manifestó en plenitud en el desarrollo de las sesiones de aprendizajes, en la relación con los estudiantes, en la capacidad de transmitir los saberes y de acompañar los procesos. Se trata de pensar en el colectivo, en la institucionalidad que afianza la pertenencia del cual se es parte y a quien se le debe afianzar. La práctica educativa no solo es un trabajo en solitario, es la posibilidad de hacernos a un modo y orden acompañados de otros que también han respondido a la vocación de educar.

Se espera con ansias la semana de vacaciones de los estudiantes. Es necesario un tiempo de respiro. Sin embargo, la SG es un tiempo para que desde la práctica docente se mejore procesos que permitirán alcanzar los objetivos propuestos. Después de todo se trata de priorizar las actividades y encontrar caminos y formas de pensar en esa cultura organizacional a la que pertenecemos y que nos permite desarrollar nuestras capacidades.

BIBLIOGRAFIA

Aguirre, F. et al. El trabajo colegiado y sus implicaciones: diseño de una propuesta pedagógica.

Burbarno, E. Importancia de la cultura organizacional en las instituciones educativas.

De la O Casillas, J. La gestión escolar.  

Guzon, J; Gonzales, F. LA comunicación entre la familia y la escuela.

MINEDU, 2023. Guía para la Gestión Escolar en instituciones y programas educativos de la educación básica.

MINEDU, 2021. Acciones sugeridas para cada bloque de semanas de gestión.

MINEDU, 2023a. Norma técnica “disposiciones para el desarrollo de las semanas de gestión en las instituciones educativas y programas educativos de la educación básica”. 

Subsecretaría de Educación Media Superior. Elementos básicos para el trabajo colegiado.  

UNESCO. 2011. Manual de Gestión para Directores de Instituciones Educativas.

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Abogado, sacerdote, educador. Investigador y miembro del equipo del Instituto de Investigación y Políticas Educativas de la Universidad Antonio Ruiz de Montoya.

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Marvin Quispe Ochoa SJ

Abogado, sacerdote, educador. Investigador y miembro del equipo del Instituto de Investigación y Políticas Educativas de la Universidad Antonio Ruiz de Montoya.

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